El año pasado, en ocasión de la elección del Papa Francisco I, le dedicamos una entrada al latín. Comentamos que no se trata de una lengua muerta, ya que seguimos utilizando muchas expresiones latinas, y además parte de la base etimológica del español reside en ella; por estas razones consideramos que de vez en cuando hay que dedicarle unas líneas a esta lengua clásica.

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El espacio Verba Volant que se emite los domingos a las 11:05 en Radio Nacional dentro del programa No es un día cualquiera, nos proporciona informaciones interesantes. La presentadora Pepa Fernández y Emilio del Río, profesor de Filología Latina en la Universidad de La Rioja, charlan sobre locuciones latinas actualmente en uso o sobre la relación de nuestro idioma y cultura con la lengua de los romanos. Les damos un par de ejemplos:

_la palabra juguete (término más que apropiado para esta semana, en plena resaca del día de Reyes) proviene del latín iocus, que significa broma, chiste, gracia, burla. Es la misma base etimológica de la palabra española joya, porque una joya, al igual que un juguete, es algo que nos produce alegría (dependiendo de la edad y de los gustos, claro está). En el mundo romano el concepto de juego estaba expresado por la palabra ludus, que en las lenguas romances fue desplazada por iocus. Ludus indicaba a la vez escuela y juego, parece por lo tanto que los romanos consideraban el aprendizaje como algo divertido (y, en nuestra modesta opinión, se debería seguir conectando estos dos conceptos); de hecho, la escuela primaria era definida como ludus literarius [Programa del 01 12 2013]

_algo que nos pasa a todos, ya que errare humanum est, es un lapsus linguae o un lapsus calami. Lapsus viene del verbo labor que significa resbalar, así que en el primer caso se trata de un tropezón lingüístico y, en el segundo, de un error involuntario al escribir (de calamum, que indica la pluma). [Programa del 17 11 2013]

Si siempre les han gustado las lenguas clásicas, les aconsejamos seguir este breve espacio radiofónico; y si, en cambio, el recuerdo de las clases de latín les sigue causando ataques de ansiedad, se lo recomendamos aún más encarecidamente, para perderle el miedo a este idioma y acercarse a él de forma lúdica.

Fuente: rtve.es, emiliodelrio.wordpress.com