Ya estamos en agosto; los que no tenemos la suerte de estar de vacaciones (bueno, ya las hemos disfrutado o las disfrutaremos más adelante, pero todos los que no cogen vacaciones este mes suelen quejarse…) estamos algo “raros”. Está muy de moda afirmar con convicción: “Me encanta la ciudad en agosto”, pero en realidad Madrid a casi 40º con todas las tiendas del barrio cerradas provoca cierta melancolía. Y la melancolía, a través del vuelo de la imaginación, nos ha llevado al romanticismo y aquí queremos parar un momento, proponiéndoles algunos ejemplos de “lenguaje del amor”, es decir, como la gente se refiere al ser amado en diferentes idiomas.

 

amor

Un artículo que apareció en BBC Mundo y en que contribuyeron el mentor lingüístico Paul Noble y asesores del Diccionario Collins nos da algunos ejemplos curiosos:

Pequeño repollo (Francés: Petit chou)
“Chou” (repollo o col) es el equivalente en francés de “corazón” o “amor” o “cariño”. Esto porque da la idea de que es pequeño y redondo, y se usa para describir el hojaldre francés, que a menudo se come con crema. Se dice que el “chou” también se parece a la cabeza de un bebé o un niño. Durante mucho tiempo a los niños franceses se les ha dicho que los niños vienen de los repollos y las niñas de las rosas.
Se puede usar también doble: “chouchou” que significaría “querido”.

Huevo con ojos (Japonés: Tamago kato no kao)
Tener cara con forma de huevo es apreciado en Japón. En Japón, a las mujeres, quienes las quieren, frecuentemente les dicen “un huevo con ojos”. Es un gran halago pues tener la cara oval, en forma de huevo, es considerado muy atractivo en esa cultura, como se puede ver en las pinturas japonesas de todas las épocas.

Pequeño elefante (Tailandés: Chang noi)
Los elefantes son los animales más queridos por los tailandeses. Supuestamente traen buena suerte, especialmente si son blancos. El símbolo del elefante puede ser una derivación del dios hindú Ganesh, lo que refleja la gran influencia que ha tenido la cultura india en la región. Los elefantes cautivan tanto a esa nación que en algún momento fueron el emblema en la bandera del país.

Peces hundiéndose, gansos cayendo (Chino: Chen yu luo yan)
Esta es una historia sobre la mujer más bella de la historia china, llamada Xi Shi. Se dice que era tan hermosa que cuando miraba un lago, los peces quedaban tan deslumbrados que se les olvidaba nadar y gradualmente se hundían hasta el fondo. Y cuando los gansos volaban sobre el lugar donde se encontraba, quedaban tan impresionados con su belleza que se olvidaban de aletear y caían en picada. Por ello, hasta el día de hoy, cuando un joven chino está enamorado de una joven, puede decir que es tan bella como Xi Shi. Y para decirlo usa esa frase: peces hundiéndose, gansos cayendo.

Fuente: bbc.co.uk/mundo/noticias